Desde hace ya unos años, se habla de esa tecnología llamada realidad virtual. La realidad virtual, o VR, provee a un usuario de un conjunto de entornos 3D con los que puede interactuar, generando una experiencia inmersiva y con un sinfín de usos prácticos.
Fundamentalmente, sus dos puntos clave son la sensación de presencia y la interacción con los elementos artificiales que se han generado. Mediante la manipulación de esos entornos 3D, somos capaces de representar situaciones realistas en las que, además de no correr ningún tipo de peligro, solo se necesitan unas gafas de VR.
La finalidad de contar esto es cómo se aplica a nuestro campo, y cómo podemos aprovecharlo de manera eficiente: en la terapia, con Psious desarrollamos un entorno visual individualizado y adaptado a las necesidades de cada paciente, lo que podemos resumir en una atención a la salud mental completamente personalizada, segura y efectiva, y por tanto, una gran mejora en la prevención, evaluación y tratamiento de los problemas de salud mental.